Destacan impacto programa capacitación maestros

A los 10 años, la niña Lorenny no sabía leer, llevaba tres años corridos reprobando el primer curso y ya entendía que tenía problemas de aprendizaje y, para aumentar sus complejos, su hermanita gemela ya estaba en el quinto de la primaria.
Esa situación se mantuvo hasta que la madre de Lorenny conoció a una maestra que se comprometió a ayudarla a aprender a leer. La educadora aplicó con la niña técnicas adquiridas en el Centro de Excelencia para la Capacitación de Maestros (Cett), un proyecto de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (Pucmm),auspiciado por la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid), que se aplica en el país desde el 2002.
Al poco tiempo, Lorenny aprendió a leer y escribir, hoy cursa el quinto de la primaria con excelentes resultados. La encargada del proyecto, doctora Liliana Montenegro, relató que la niña ha tenido altas y bajas, pero que gracias al apoyo emocional y pedagógico de la maestra su crecimiento académico le permitió ser promovida desde tercero a quinto de la primaria.
Montenegro informó hoy que el Cett ha capacitado unos dos mil 300 maestros con un impacto en alrededor de 90 mil niños y niñas de sectores desfavorecidos.
El objetivo del programa es mejorar las competencias de los docentes para que logren la excelencia en la enseñanza de la lectura y escritura en niños, desde el primero hasta el cuarto curso de escuelas con condiciones sociales extremas del país.
La sede central del programa está en Santiago y trabaja en escuelas Santo Domingo, La Vega, Moca y Santiago, abarcando 78 escuelas en barrios y campos, recomendadas por la Secretaría de Educación por sus condiciones marginales y por sus problemas con la alfabetización.
Montenegro valoró los resultados del programa y la receptividad de los maestros para su implementación, ya que requiere un esfuerzo adicional y cambios en la tradicional metodología de la enseñanza.
El plan de trabajo incluye capacitación a los docentes, círculos de renovación y estudios independientes, así como apoyo presencial en las aulas un mínimo dos veces por mes. En esas visitas los colaboradores del Cett ayudan al maestro a aplicar las técnicas y conceptos adquiridos.
El programa educativo se apoya en el currículum nacional, pero modificando la enseñanza de elementos “sin sentido como ma, me, mi, mo, mu”, por “elementos funcionales”, en el que el alumno aplica los conocimientos a situaciones convencionales como listas de colmados y cuentos.
El Cett, que inicia con cada año escolar en las escuelas y antes de éste con capacitación a los maestros, forma parte de un consorcio integrado por universidades de Honduras, El Salvador, Nicaragua, Guatemala y México.
Los resultados que espera lograr la Pucmm con el proyecto son desarrollar un modelo regional de capacitación de docentes, innovador y unificado, lo suficientemente flexible como para adecuarse a la diversidad cultural de los países participantes. Prestar atención especial a los docentes que trabajan en los campos y zonas urbanas marginales del menor nivel económico. Así como, aumentar los resultados obtenidos por los niños en lectura y escritura.